Estos testimonios fueron recogidos en varios puntos del país a partir de la socialización del libro
Testimonio 1: El río como frontera
Contexto:
Es el amanecer, el río Táchira fluye silencioso, pero con una corriente constante que promete desafíos. A un lado, un grupo de personas migrantes observa el agua, algunos ya han decidido cruzar, otros dudan. Un hombre, con el rostro marcado por la preocupación, carga a su hijo sobre los hombros. Sabe que no hay otra opción; el río es su única esperanza.
Vivencia:
El agua está fría, y la corriente se siente más fuerte de lo que esperaba. Cada paso es un esfuerzo por mantener el equilibrio, la bolsa con lo poco que lleva es un peso adicional que dificulta su avance. El niño llora, mientras el padre sigue adelante, sabiendo que no puede volver atrás.
Imágenes más relevantes:
El hombre con su hijo sobre los hombros, el agua llegándole hasta la cintura, una balsa improvisada flotando cerca con maletas y recuerdos, y al fondo, el otro lado de la frontera, que parece tan cerca, pero a la vez inalcanzable.
Testimonio:
"No había opción, el río era la única salida. Sentí que el agua me jalaba hacia abajo, pero no podía soltar a mi hijo. Lo llevaba sobre mis hombros, su llanto me recordaba que tenía que seguir. Cada paso era más difícil que el anterior, pero sabía que, si no lo hacía, no habría futuro para nosotros. No me importaba el frío ni la corriente; todo lo que importaba era llegar al otro lado. En mis bolsillos, lo único que llevaba eran unas fotos y un par de monedas. Sabía que no sería suficiente para pagarle al trochero, pero confiaba en que, de alguna manera, lo lograríamos."
Testimonio 2: El puente Simón Bolívar
Contexto:
El puente Simón Bolívar está lleno de gente. Familias completas cargan maletas, costales, y hasta carritos con sus pertenencias. El calor es agobiante, y el aire está cargado de polvo. Un hombre de mediana edad observa la fila que avanza lentamente, con una mezcla de impaciencia y resignación.
Vivencia:
Cruzó el puente varias veces antes, pero esta vez es diferente. Las autoridades del lado colombiano lo observan con desconfianza. Tiene miedo de que lo detengan por su pasaporte vencido. Sabe que al final del puente lo esperan los trocheros, exigiendo una cuota que no puede pagar.
Imágenes más relevantes:
La multitud cruzando el puente, los rostros cansados de los migrantes, los soldados venezolanos vigilando desde un lado, y al final del puente, los trocheros con sus miradas calculadoras, esperando a su próxima víctima.
Testimonio:
"Cruzamos el puente todos los días, pero esta vez sabía que algo estaba mal. Mi pasaporte estaba vencido, y las autoridades colombianas me miraban como si fuera un criminal. Temía que me detuvieran, pero seguí caminando. Al llegar al otro lado, allí estaban los trocheros. Nos pidieron dinero, y les di lo poco que tenía. No fue suficiente, me pidieron más, pero ya no tenía nada. Uno de ellos se acercó a mi hija y le arrancó la mochila. En ese momento sentí que el mundo se me venía abajo. No era solo la pérdida de nuestras cosas, sino el dolor de ver cómo se desvanecía la poca dignidad que nos quedaba."
Testimonio 3: El salto al otro lado
Contexto:
Es de noche, y la trocha está casi vacía. Un grupo de migrantes camina en fila india, guiados por la luz de una linterna en manos del coyote. El terreno es irregular, y los sonidos de la selva parecen amplificarse en la oscuridad. Entre el grupo, una joven mujer avanza con dificultad, cargando una mochila pesada.
Vivencia:
Al llegar al borde del río, el coyote les indica que deben cruzar rápidamente para evitar ser detectados. La joven duda, sabe que no sabe nadar bien, pero no hay tiempo para pensarlo. Mira a su alrededor buscando ayuda, pero todos están concentrados en sus propios problemas. Decide lanzarse al agua.
Imágenes más relevantes:
El río oscuro, la linterna del coyote brillando en la distancia, la joven mujer saltando al agua con su mochila, el miedo reflejado en su rostro mientras lucha por mantenerse a flote.
Testimonio:
"No había tiempo para pensar, el hombre (coyote) nos apuraba, y sentí que si no me lanzaba al agua en ese momento, me quedaría atrapada para siempre. Sabía que no era buena nadadora, pero no podía dejar que el miedo me paralizara. Salté al agua, la corriente me golpeó y por un momento pensé que me ahogaría. Mi mochila era pesada, pero no podía soltarla; dentro tenía las únicas fotos de mi familia. Luché por llegar al otro lado, y cuando finalmente lo logré, caí de rodillas en la orilla, temblando de frío y de miedo. Sabía que aún nos quedaba mucho por delante, pero al menos habíamos cruzado."
Testimonio 4: Los lomotaxistas y la extorsión
Contexto:
Es un día nublado en la trocha. Los lomotaxistas, cargados con maletas y bultos de chatarra, recorren el camino con dificultad. Algunos van en bicicletas desvencijadas, otros a pie, arrastrando lo que pueden. Un grupo de migrantes sigue su paso, temerosos de ser detenidos.
Vivencia:
En el camino, un retén improvisado detiene a los migrantes. Los hombres armados exigen una cuota para dejarlos pasar. Algunos intentan negociar, pero las armas no permiten mucha discusión. Un joven que lleva varios días caminando se queda sin dinero, y observa con desesperación cómo su única maleta es confiscada.
Imágenes más relevantes:
El retén con hombres armados, las maletas apiladas en un costado, los lomotaxistas cargando sus pesadas mercancías, y el joven migrante, con las manos vacías, observando cómo se llevan lo poco que tenía.
Testimonio:
"Nos detuvieron en la mitad del camino, ya lo esperaba. Los hombres armados aparecieron de la nada y nos exigieron dinero para pasar. Sabía que no tenía suficiente, pero intenté negociar. No funcionó. Me arrebataron mi maleta, la única que llevaba. Dentro tenía algo de ropa, unas fotos y los pocos recuerdos que me quedaban de Venezuela. Vi cómo se la llevaban, y supe que nunca la volvería a ver. Me quedé de pie, sin nada, sintiendo que había perdido no solo mis cosas, sino una parte de mí mismo."
Testimonio 5: El transporte improvisado
Contexto:
En una carretera polvorienta que serpentea entre la frontera de Venezuela y Colombia, un camión viejo y desvencijado recoge a decenas de migrantes. El sol del mediodía es inclemente, y el interior del vehículo está abarrotado de personas, maletas, y bultos de mercancía. Todos comparten el mismo destino incierto, sin saber si llegarán a su destino sin complicaciones.
Vivencia:
El camión avanza lentamente, y el ruido del motor indica que está al borde de fallar. Los migrantes están apiñados en la parte trasera, algunos sentados en maletas, otros de pie, sosteniéndose unos a otros para no caer cuando el vehículo da tumbos. El cansancio es evidente en sus rostros, pero la esperanza de llegar los mantiene en silencio.
Imágenes más relevantes:
El camión viejo, lleno de gente y maletas. Los rostros cansados de los migrantes, algunos mirando al horizonte, otros con la cabeza baja, vencidos por el agotamiento. Al fondo, la carretera polvorienta y el cielo encapotado que augura una tormenta.
Testimonio - Texto:
"El camión estaba tan lleno que apenas podíamos movernos. El calor era insoportable, y el polvo de la carretera se metía en los ojos y en la boca. Pero nadie se quejaba, sabíamos que este camión era nuestra única opción para llegar al otro lado. Nos dijeron que el precio no era el mismo para todos, y me pregunté si algún día sabríamos quién pagó más o menos. Lo importante era que seguíamos avanzando. Cada bache en el camino nos sacudía, y más de uno perdió el equilibrio y cayó sobre las maletas. Pero nadie se quejaba. Al menos nos estábamos moviendo, aunque el motor sonaba como si fuera a fallar en cualquier momento."
Testimonio 6: El paso del tiempo en la trocha
Contexto:
El paisaje alrededor de la trocha está lleno de huellas de lo que alguna vez fueron caminos transitados. Las marcas en el suelo polvoriento hablan de los pasos de miles de personas que han cruzado antes. Un hombre mayor, cargando una pequeña maleta, avanza lentamente por el camino. Sus ojos están fijos en el horizonte, pero su mente está llena de recuerdos de cruces anteriores.
Vivencia:
Es su tercer intento de cruzar la frontera en los últimos años. La primera vez fue expulsado, la segunda vez lo asaltaron en el camino, y ahora, con más precaución, ha decidido intentar nuevamente. Cada paso le recuerda el peso de los años, pero también la necesidad de seguir adelante.
Imágenes más relevantes:
El hombre, con la espalda encorvada por el peso de la maleta, caminando solo en la trocha. El sol iluminando las huellas en el camino. A lo lejos, otros migrantes, casi invisibles, que también avanzan hacia el horizonte.
Testimonio - Texto:
"Esta no es la primera vez que cruzo la trocha, pero cada vez parece más difícil. La primera vez me devolvieron antes de llegar al río. La segunda, me asaltaron y perdí todo lo que llevaba. Esta vez, aprendí a no llevar mucho. Solo una maleta pequeña, con lo esencial. Cada paso que doy me recuerda los años que han pasado. He visto a otros cruzar más rápido, pero mis piernas ya no responden como antes. Aun así, no me detengo. No puedo detenerme. Cada paso es una victoria, cada metro que avanzo es un recordatorio de que sigo vivo, de que todavía tengo algo por lo que luchar."
Testimonio 7: La extorsión en la frontera
Contexto:
Es de noche en la trocha, y el silencio solo es interrumpido por los susurros nerviosos de los migrantes que avanzan en fila. Al frente, un hombre armado detiene a los que intentan cruzar, exigiendo una cuota para dejarles pasar. La oscuridad hace que todo sea más intimidante, y las caras de los migrantes reflejan el miedo a no tener suficiente dinero para pagar.
Vivencia:
Una joven mujer, que viaja sola, se acerca al hombre armado. Sabe que no tiene el dinero suficiente para pagar la cuota completa. Intenta explicarle su situación, pero el hombre no tiene compasión. Ella ofrece lo poco que tiene, pero el hombre exige más.
Imágenes más relevantes:
La mujer, con la mirada baja, entregando sus últimas monedas. El hombre armado, impasible, con una linterna en la mano, iluminando el rostro cansado de la mujer. A su alrededor, otros migrantes observan en silencio, temerosos de que les toque lo mismo.
Testimonio - Texto:
"Sabía que no tenía suficiente dinero, pero no podía volver atrás. Cuando me detuvieron, intenté explicarles que no llevaba mucho, que estaba sola, que todo lo que tenía era para sobrevivir unos días más. Pero no les importaba. Me pidieron más, y yo no tenía nada. Les di lo último que tenía, unas pocas monedas, y aun así, no fue suficiente. Me quitaron mi mochila, todo lo que llevaba. En ese momento sentí que lo había perdido todo. No eran solo mis cosas, era mi dignidad, mi esperanza de encontrar algo mejor al otro lado. Vi a los otros observando en silencio, sabiendo que ellos serían los siguientes."
Testimonio 8: La invisibilidad de los migrantes
Contexto:
Es una tarde lluviosa en la trocha. Los migrantes avanzan bajo la lluvia, algunos con plásticos improvisados sobre la cabeza, otros simplemente dejando que el agua los empape. En el fondo, un grupo de hombres, conocidos como lomotaxistas, cargan bultos de contrabando y mercancía en sus espaldas, atravesando el río con dificultades.
Vivencia:
Entre los migrantes, un hombre joven intenta pasar desapercibido. Sabe que, cuanto menos visible sea, menos problemas tendrá. Se ha mimetizado con los demás, caminando en silencio, con la cabeza baja, esperando que los trocheros lo ignoren.
Imágenes más relevantes:
El hombre joven, empapado por la lluvia, caminando en la fila de migrantes, con la mirada fija en el suelo. Los lomotaxistas avanzando con dificultad a su lado, cargando grandes bultos en sus espaldas. Al fondo, la niebla cubre el río y el horizonte.
Testimonio - Texto:
"Aprendí a no destacar, a no llamar la atención. En la trocha, cuanto más invisible seas, mejor. Caminé bajo la lluvia, con la cabeza baja, como si no existiera. No quería que me vieran, no quería que los trocheros se fijaran en mí. Sabía que si lo hacían, me pedirían algo que no podía darles. Así que avancé en silencio, mimetizado entre los demás, esperando que la lluvia me ocultara. No era la primera vez que cruzaba, pero cada vez se hacía más difícil. Esta vez, al menos, logré pasar sin que me detuvieran. Pero sé que no siempre será así."
Testimonio 9: El trabajo en la frontera
Contexto:
En un mercado improvisado, a unos metros de la frontera, los migrantes que han logrado cruzar intentan vender o intercambiar sus pertenencias. El lugar está lleno de ruido: vendedores ofreciendo alimentos de dudosa calidad, compradores regateando, y algunos migrantes buscando trabajo desesperadamente.
Vivencia:
Un hombre joven, que ha llegado solo a la frontera, se acerca a un grupo de personas que ofrecen trabajo. Le prometen un trabajo en una finca cercana, pero sin papeles y por un sueldo miserable. El hombre duda, pero sabe que necesita cualquier cosa para sobrevivir.
Imágenes más relevantes:
El joven parado frente a los empleadores, que lo observan con desinterés. El mercado lleno de personas vendiendo y comprando, mientras los migrantes deambulan con miradas cansadas. Al fondo, un cartel con una oferta de trabajo que promete mucho, pero que todos saben que no será suficiente.
Testimonio - Texto:
"Llegué a la frontera con lo puesto y lo poco que me quedaba de dinero. No sabía a dónde ir ni qué hacer. Alguien me dijo que en el mercado podría encontrar trabajo, y me acerqué a preguntar. Me ofrecieron trabajo en una finca, pero sabía que no era un buen trato. Me pagarían una miseria, sin papeles, sin garantías. Pero no tenía opción. Si no aceptaba, no tendría cómo comer. Así que lo tomé, a pesar de saber que era una trampa. No sé cuánto tiempo podré resistir en esas condiciones, pero por ahora, es lo único que tengo."
Testimonio 10: La pérdida en el río
Contexto:
El río Táchira fluye con fuerza después de las lluvias. Un grupo de migrantes se detiene en la orilla, observando las corrientes. Una madre con dos hijos pequeños está entre ellos, aferrada a sus maletas con nerviosismo. El coyote les indica que es el momento de cruzar, y aunque el río parece peligroso, no tienen otra opción.
Vivencia:
La madre entra al río, sosteniendo a su hijo mayor de la mano y cargando al más pequeño en la espalda. Las maletas flotan a su lado, pero de repente, una corriente más fuerte las arrastra río abajo. La mujer intenta agarrarlas, pero casi pierde el equilibrio, y debe elegir entre salvar a sus hijos o sus pertenencias.
Imágenes más relevantes:
La madre luchando por mantenerse en pie en el río, sus maletas flotando fuera de su alcance. El coyote gritando desde la orilla para que sigan avanzando. Los niños aferrados a su madre, mientras el río parece llevarse todo lo que tienen.
Testimonio - Texto:
"Entramos al río sabiendo que era peligroso, pero no teníamos más opción. Sostuve a mis hijos con todas mis fuerzas, pero cuando las maletas empezaron a flotar y el río las arrastró, sentí que todo lo que teníamos se iba. Intenté alcanzarlas, pero casi pierdo el equilibrio. No podía arriesgarme, mis hijos eran lo más importante. Vi cómo las maletas se alejaban, llevándose con ellas todo lo que nos quedaba: la ropa, las fotos, los documentos. En ese momento, me di cuenta de que no importaba lo que perdiéramos, mientras estuviéramos juntos. El río se llevó nuestras cosas, pero no a nosotros."
Testimonio 11: El coyote y la traición
Contexto:
Es de noche en una trocha mal iluminada. Un grupo de migrantes sigue a un coyote, quien les ha prometido un cruce seguro por una suma considerable. Los migrantes, agotados por días de caminata, confían en que están cerca de su destino. Sin embargo, el coyote tiene otros planes.
Vivencia:
A mitad del camino, el coyote se detiene y exige más dinero. Los migrantes, ya sin recursos, no pueden pagarle. El coyote se va, dejándolos solos en medio de la trocha, sin saber qué hacer ni cómo continuar. El grupo queda atrapado, vulnerable a los peligros que acechan en la frontera.
Imágenes más relevantes:
El coyote alejándose en la oscuridad, mientras los migrantes se quedan parados en el camino, sin saber qué hacer. Las miradas de desesperación, algunos sentándose en el suelo, otros tratando de encontrar una solución. La trocha desierta, oscura y peligrosa, extendiéndose frente a ellos.
Testimonio - Texto:
"Nos prometió que nos llevaría al otro lado por una suma alta, pero creímos que valía la pena. Habíamos caminado por días, y el cansancio era insoportable. Pensamos que ya casi llegábamos. Pero en mitad del camino, el coyote se detuvo y exigió más dinero. No teníamos nada más. Intentamos negociar, pero él simplemente se fue. Nos dejó solos, en la oscuridad, sin saber qué hacer. Nos quedamos allí, atrapados en la trocha, sin nadie que nos ayudara. Sentí que habíamos sido traicionados, que habíamos confiado en la persona equivocada. Y ahora estábamos a merced de lo que viniera."
Testimonio 12: La invisibilidad en la multitud
Contexto:
El puente Simón Bolívar está abarrotado de gente, como todos los días. Miles de personas cruzan de un lado al otro, con maletas, costales y mochilas. Entre ellos, una mujer mayor camina lentamente, intentando no ser empujada por la multitud. Su mirada está fija en el suelo, y su cuerpo parece perdido entre el mar de personas que la rodean.
Vivencia:
La mujer ha cruzado la frontera varias veces, pero cada vez se siente más invisible. Nadie la mira, nadie se detiene a ayudarla cuando tropieza. A su alrededor, la gente pasa rápidamente, ocupada en sus propios problemas. La mujer sigue caminando, sola, como si no existiera para los demás.
Imágenes más relevantes:
La mujer mayor, caminando lentamente entre la multitud, casi invisible. La gente pasando a su lado sin mirarla, empujándola sin darse cuenta. El puente lleno de maletas y personas, todas apresuradas, mientras la mujer avanza con dificultad.
Testimonio-Texto:
"He cruzado este puente muchas veces, pero cada vez me siento más sola. La gente me pasa por el lado, ni siquiera me miran. Tropiezo, pero nadie se detiene a ayudarme. Soy invisible para ellos. A veces siento que ya no existo, que solo soy una sombra entre la multitud. Camino despacio, porque mis piernas ya no responden como antes, pero eso no importa aquí. Todos tienen prisa, todos están concentrados en sus propios problemas. Yo solo quiero llegar al otro lado, pero cada vez parece más difícil. La frontera no es solo una línea entre dos países; también es una barrera entre las personas."
Testimonio 13: Los medicamentos vencidos
Contexto:
En un improvisado puesto de venta, cerca de la frontera, un hombre ofrece medicamentos a los migrantes que pasan. Los frascos están viejos, y muchos de los medicamentos están vencidos, pero es lo único que hay. Una mujer con su hija pequeña se acerca, desesperada, buscando algo para calmar la fiebre de la niña.
Vivencia:
La mujer no tiene dinero para comprar medicamentos en una farmacia, así que recurre al vendedor. Sabe que los medicamentos no son seguros, pero no tiene otra opción. La fiebre de su hija sigue subiendo, y cada minuto que pasa es una tortura.
Imágenes más relevantes:
La mujer entregando sus últimas monedas al vendedor, mientras observa con desconfianza los frascos de medicamentos vencidos. La niña, acostada en un rincón, con la fiebre consumiéndola. El vendedor, contando las monedas sin mirarlas, mientras el tráfico de migrantes sigue su curso.
Testimonio- Texto:
"Mi hija tenía fiebre desde hacía días, y no había manera de conseguir medicamentos. La llevé conmigo a la frontera, esperando encontrar algo, cualquier cosa que pudiera ayudarla. Cuando vi al vendedor de medicinas, supe que no eran seguros, que muchos de esos frascos estaban vencidos. Pero no tenía opción. No tenía dinero para ir a una farmacia, ni tiempo para esperar. Le di las últimas monedas que me quedaban, sabiendo que podría estar poniendo en riesgo la salud de mi hija, pero ¿qué más podía hacer? A veces, en la frontera, tomamos decisiones desesperadas, porque simplemente no tenemos opción."
Testimonio 14: El secuestrador en la trocha
Contexto:
Algunos migrantes son secuestrados en los caminos clandestinos controlados por grupos criminales, quienes los mantienen cautivos hasta que sus familias paguen un rescate. Las condiciones son inhumanas, y la violencia es utilizada para presionar a las familias a entregar dinero rápidamente.
Vivencia:
Un joven migrante es secuestrado mientras cruza una trocha. Los secuestradores se comunican con su familia en Venezuela, exigiendo un rescate que la familia no puede pagar. Durante su cautiverio, el joven es maltratado y obligado a grabar mensajes para presionar a su familia a reunir el dinero.
Imágenes más relevantes:
El joven migrante atado en un pequeño cuarto, con moretones en el rostro y el cuerpo, grabando un mensaje para su familia. Los secuestradores observando desde la puerta, mientras el joven lucha por contener las lágrimas. Su familia, al otro lado de la línea telefónica, desesperada por no poder reunir el dinero exigido.
Testimonio - Texto:
"Me golpearon y me ataron. Me obligaron a grabar un mensaje para mi familia, pidiéndoles que reunieran el dinero. Sabía que no tenían el dinero, pero si no lo hacían, me matarían. Nunca había sentido tanto miedo en mi vida. No sabía si volvería a ver a mi familia otra vez."